9/04/2015

Morena (Muraena helena)


Por todos es sabido que las morenas suelen ser señoritas temperamentales, y la Muraena helena o morena del Mediterráneo no es ninguna excepción. Aunque sin alcanzar las cotas de maldad de Flotsam y Jetsam (¡cuánto daño ha hecho Disney a la reputación de estos animales!), la morena puede llegar a ser agresiva si se siente amenazada o si ha sido sometida a un proceso de feeding. ¿Y cómo es eso?

Imaginen que un club de buceo decide alimentar a una morena, montando así pequeño espectáculo para deleite de sus clientes. Esa morena se acostumbrará a asociar a los buzos con alimento. Si por casualidad el buzo no lleva alimento para ella, la morena sacará su genio y puede optar por llevarse algo de picoteo: un dedito, una oreja, o cualquier cosa que asome. Buzo = comida. Si buzo no llevar comida, buzo ser comida. 

La morena es inconfundible: su silueta robusta y serpentina de color marrón con manchas amarillas, levemente aplanada por los lados, puede llegar a alcanzar hasta metro y medio de longitud. Carecen de aletas pectorales, y la caudal y dorsal aparecen unidas en una cresta que ondea con hipnótico vaivén de la cabeza a la cola. Su enorme boca posee una terrible dentadura, con una fila de piezas tan finas y cortantes como esquirlas de cristal. 

Lo más habitual es ver a las morenas escondidas entre las rocas, asomando la cabeza con la boca entreabierta como si siempre estuvieran listas para atacar. No es así. Las morenas necesitan abrir la boca para que el oxígeno llegue correctamente a las branquias, no tienen nada en contra de tu persona... siempre y cuando no molestes, claro. No resulta inteligente molestar a una morena: aunque su mordedura no es venenosa, si que es muy dolorosa y tiende a infectarse. Para ver a las morenas en acción hay que aventurarse a una inmersión nocturna, ya que como muchos habitantes del océano, éstas descansan de día y cazan de noche.

Atención: Adivina adivinanza ¿Qué tienen en común la morena del Mediterráneo y Alien, el Octavo Pasajero? ¿¿Pero tienen algo en común?? Pues si: la dentadura. Al igual que Alien, la morena posee un segundo juego de mandíbulas, ubicados en el interior de la garganta y dotado de afilados dientes. Se llama mandíbula faríngea, y sirve para atrapar a la presa e introducírsela en el gaznate a una velocidad de vértigo. ¡Felices pesadillas!